24 de agosto de 2011

Falta una semana de mi calendario.

Al día de hoy llevan recogidas 127 toneladas de basura en Cuatro Vientos.

Llegaron con su alegría, con sus canticos preparados, con sus banderas, todos uniformados con camisetas de colores llamativos y gorritos de ala ancha y mochilas uniformes para guardar sus volátiles pertenencias.  Hoy que se han marchado salta la noticia de que Bengasi está tomada por los rebeldes libios lo que me hace pensar en una similitud de hechos, de diferente naturaleza pero con las mismas técnicas de invasión, existen otras invasiones más lejanas pero tampoco es el caso de extendernos en la historia, está ahí y cualquiera en cualquier momento la puede dar un repaso. Mochilas de colores cargadas de libros espirituales, de bonos de comida casi gratuítos y de bonos de transporte a un precio insolidario con el resto de los madrileños que todo el año se afanan por utilizarlo para sus tareas cotidianas, eso sí, ahora más caro que para las avanzadillas de la fé, y uno que es madrileño de cepa, de padres y abuelos madrileños y ya tiene una cierta edad ha vivido en otras ocasioes ese tipo de transumancias humanas, ha ido viendo cómo la Villa, (porque no olvidemos que Marid sigue siendo Villa aunque a algunos les disguste), se ha ido llenando de gente foránea, gente de otras localidades y países hasta el punto de que la mezcla inevitable ha llegado a crear una especie de madrileño con ascendencias tan variadas que me río yo de los habitantes de los Estados Unidos, todos americanos pero siempre existe el clásico abuelo irlandés, chino, italiano, etc. el caso es que en Madrid los madrileños de raiz ya vamos quedando pocos, eso sí, qué tendrá Madrid que todo el mundo que viene y se queda, se vuelve madrileño y de los de siempre... ¿Eh?    Tiene su mérito, no creas, porque vivir en Madrid no es fácil ya que tenemos que convivir con las prisas, el ruido y los precios de las cosas, más caras que en otras ciudades ya que Madrid al ser la capital tiene que diferenciarse en algo, así que pese a todo sobrevivimos, pese a que Madrid se puede considerar repartida entre los que más tienen y los que menos, cosa que cualquier visitante puede comprobar con facilidad en sus servicios y en el trato que se dá a las cosas de todos. Existen barrios ricos y barrios pobres como en todas las grandes ciudades y no es difícil comprobarlo, lo que convierte a Madrid en una ciudad ocupada por sus gentes, cada una en su medida y según sus posibilidades, pero ocupada siempre por los mismos a los que habría que añadir los visitantes que por ciertos y que en cortos espacios de tiempo se acercan a Madrid para admirar todo lo que Madrid les ofrece, tratando las cosas y los sitios con el mismo cuidado y respeto que lo tratamos los que vivimos dentro, alguna excepción hay, sí, pero el conjunto general de la gente que pasea, vive y campa por Marid no deja de ser gente a la que le gusta y se preocupa por el entorno y por las cosas que les rodean.  Pero llegaron éllos, llegaron en nombre de no sé quién y la ciudad se dió la vuelta como un calcetín recién lavado, las calles no daban de sí para acoger tanto griterío histérico y tanto cántico ñoño como tarjeta de presentación, todos de diferentes colores, vestidos de curas y de monjitas alegres de la vida como en un carnaval pero esta vez sin las caretas propias de la señalada fiesta. Aquí cada uno enseñaba sus cartas y la verdad era sobrecogedor comprobar que su baraja estaba compuesta únicamente por comodines y encima marcados, cartas a las que cada uno del resto de ciudadanos no podíamos superar ni competir en buena lid, sacabas tu baraja y te dabas cuenta de que jugabas con cartas perdedoras lo que adivinaba claramente cual iba a ser el resultado final de la partida.


17 de agosto de 2011

Esa santa basura en mi Madrid...

Me llama la atención una noticia aparecida en los medios que refleja las casi 25 toneladas de basura recogida en la Plaza de La Cibeles durante el día de ayer, todos recordaremos, unos más que otros que ayer fué el día del baño de multitudes local, de la jerarquía católica española, aquella que con orgullo se siente ser llamada como heredera de la santa inquisición representada por el Señor Rouco Varela y un número incontable de acólitos a la secta, pero volviendo a la cantidad ingente de basura recogida hay que tener en cuenta que el Jefe aún no ha llegado, por lo que previsiblemente el día que le corresponda su correspondiente baño de multitudes la cantidad de basura que se genere puede aumentar tanto en su peso como en su medida en una cantidad considerable a reflejar en su momento.

A todo ésto, los creadores del artículo que refleja tales cantidades no pueden rendirse al hecho de la comparación con otros eventos de tales características vividos en Madrid en los últimos tiempos haciendo incapié en dos de los más señalados, la celebración de la Cabalgata de Reyes 28,2 toneladas y el desalojo del punto informativo del 15M en Sol y Recoletos del pasado 2 de agosto, 26.940 kilogramos.

Estas cifras habría que analizarlas con detenimiento y explicarlas, pues no es lo mismo comparar  la cantidad de basura recogida en un único sitio, Plaza de Cibeles, con los 28.200 Kilos de la Cabalgata, salvo que ésta estuviera todo el tiempo dando vueltas alrededor de la fuente como hacen los seguidores del Madrid cuando ganan algo. También habría que tener en cuenta lo del punto informativo, en éste se contabiliza también la infraesctructura montada para tal hecho y que refleja un porcentaje bastante mayor de la cantidad total.

Bien es verdad que si en la Plaza de la Cibeles durante el encuentro de las alegres  y risueñas Juventudes Católicas no se cuenta la infraestructura montada para tal efecto, que si se contase y dada la pomposidad y aparatosidad de su construcción alcanzarían a unos cuantos de miles de toneladas más, a todo ésto también habría que contar el resto de los espacios ocupados por los herederos de los 100.000 hijos de San Luis que además de ocupar la Plaza de la Cibeles, utilizan el Retiro y otros tantos espacios robados a los madrileños a su libre alvedrío, pero cerniéndonos a la basura, habría que decir que también ésta cuenta, y estamos hablando de basura orgánica y de restos abandonados que nuestro servicio de limpieza pagado por todos los madrileños se encargan de hacer ver que por allí no ha pasado nada.

Me refería sólo a la basura recogida que la de otro tipo ya se encarga cada uno de llevar la suya encima.

Seguro que sólo con el importe de esas comidas de peregrino que tan baratas salen en precio se podría haber hecho una buena labor en Somalia y se hubiera ahorrado una considerable cantidad en los gastos de limpieza de mi ciudad, pero la Iglesia está para cosas más importantes, más grandes y más elevadas...



3 de agosto de 2011

No todos somos políticos.

Partiendo de la base de que la gente que compone o simpatiza con el 15M no somos políticos, profesión como otra cualquiera, cabe decir que es a éllos, a los políticos, a los que les corresponde poner en marcha las medidas que les está reclamando el pueblo para arreglar un poco la vida de la gente, ahora en el gobierno está el PSOE y está precisamente haciendo todo lo contrario de lo que se les pide y que es necesario si queremos tener un país autenticamente libre y democrático.  También estamos viendo a diario cómo se carga el peso de la deuda al pueblo y no a los que por su codicia la han creado y si se protesta por ello se recurre a la intimidación policial en la calle y a la connivencia judicial  eliminando libertades y dando golpes.  No son los del 15M los que se suben sus sueldos en unos porcentajes escandalosos e inmorales y se financian gastos particulares con el dinero de todos, ni los que cierran ambulatorios para recortar gastos mientras hay fortunas en Suiza y otros paraísos fiscales de gente y entidades totalmente identificadas. No es el 15M el que regala terrenos y perdona impuestos y que además con el dinero de todos también organiza visitas de "estado" a la Iglesia, cuando al gobierno se le llena la boca de decir que este es un estado aconfesional. Y ahí está el gobierno de turno (gobierno dirigido por alguien al que llaman "mercados" y que en realidad son oligarcas que han mantenido sus privilegios a costa de los demás durante siglos) consintiendo todo ésto. ¿Qué hacemo, cambiamos los roles y el pueblo se covierte en gobierno y los políticos de estómagos agradecidos trabajan para levantar el país? ¿O que cada uno haga su trabajo bien hecho? Ahora me viene al recuerdo cuando corríamos delante de los grises en tiempos de Franco y la verdad, no creo que ésto haya cambiado tanto, lo que me hace pensar desde hace ya mucho tiempo que la transición ha sido como la zanahoria atada al palo para que todo siga igual, que todos caminen por el camino que han marcado y para que los mismos de siempre sigan teniendo los mismos privilegios y que además están ahí elegidos y no por el 100% de la población precisamente como éllos no se cansan de repetir.